
¡Qué rápido pasan las horas! Ya son casi las 13:00 de un mediodía reluciente y en esa plaza del Pumarejo unos 200 hombres deseosos de que les den trabajo. Hoy no hay paro para estos 200 hombres, mañana Dios dirá, hoy todos trabajaran por y para el hijo de Dios y su bendita madre, Amigo, sí tú el de los cascos, ¿se sabe ya algo? sí que la Sed no sale, 80% de agua…pues vaya tela!!!!¿cómo que San Bernardo tampoco? Esto pinta feo compañeros…y de repente la voz del capataz se escucha entre tanto gentío…¡oido! y se hace el silencio…quiero a todo el mundo vestido en la Iglesia ya, que estoy seguro que vamos a salir…y un rayo de esperanza recorre nuestros corazones, se aceleran los pensamientos y todos los costaleros nos vamos preparando con la mente puesta en un objetivo, lograr que toda Sevilla vea al Señor de la Paz y su bendita madre del Carmen. Ya son las 14:45 y en el interior de la parroquia se hace el silencio, “hermanos hay que proteger el patrimonio de la hermandad, este son los niños, viene un frente que dejará lluvias…(y explota el pesimismo)…vamos a esperar una hora!, en ese momento y delante de nuestros titulares todos negamos 3 veces cómo hizo Pedro, hoy no salimos, que no que está el día feo, mira ya llueve, este año no va a poder ser…¡qué rápido pasa esa hora!¡QUE SÍ!¡QUE SALIMOS!...más rápido que de costumbre, más sufrido que otros años…pero ver las caras de los Sevillanos de cuna y de adopción lanzando sus plegarias a nuestro titulares merece tamaño esfuerzo…son las 00:30 ya es Jueves santo y la hermandad del Carmen Doloroso ha podido completar sin ningún percance otro año más su estación de penitencia…y se terminó por este año, ya sólo quedan días de cultos y visitas anónimas para pedirles nuevamente su intersección por nosotros, para agradecer la fuerza que nos dan día a día…
Me invade un pensamiento…de no haber sido miércoles santo, habría sido una noche de miércoles cualquiera.
@LaCeraFundida