domingo, 24 de febrero de 2013

Reflexiones de Cuaresma.

Priostía de Santa Marta
Hoy, tan solo faltan 28 días para el esperado Domingo de Ramos. En Sevilla ya se nota la llegada de la cuaresma. En las hermandades ya comienzan los preparativos para la Semana Santa. En algunas hermandades se están terminando los cultos para comenzar a soñar con la semana que tanto nos gusta.
Este año, la cuaresma de Sevilla viene marcada por un acontecimiento histórico que aunque no se pudo celebrar por la lluvia, sigue muy presente en muchos cofrades, y de eso quería hablaros hoy.

El vía-crucis de la Fe era algo extraordinario, por lo tanto entiendo la expectación que se he generado en torno a él, pero lo que no entiendo es la excesiva importancia que se le está dando, sobre todo en los medios de comunicación, que al fin y al cabo son los que lo controlan todo (por su capacidad de llegar a las masas). Pienso que en cuaresma hay muchas cosas de las que hablar, muchos cultos que narrar, mucha información que contar y mucho que disfrutar. 


Pongo la televisión el día que hay algún programa de Semana Santa y el tema central del que tratan vuelve a ser el vía-crucis de la Fe una y otra vez. 
De mientras, en Sevilla están ocurriendo cosas. Mientras en la prensa los periodistas se preguntan si hizo bien Torreblanca en sacar su paso a la calle, en el seno de cualquier hermandad hay personas trabajando y viviendo la cuaresma. Quiero hacer hincapié en el contraste tan grande que existe entre las  "diferentes Semanas Santas" que se pueden vivir hoy en día. Una de ellas es pegada al ordenador, siguiendo todos los programas habidos y por haber; y otra de ellas es desde dentro de una hermandad.

Como todo en esta vida, en el término medio está la virtud. No hay que creerse todo lo que se ve en la televisión o se escucha en la radio, hay que tener un criterio propio para crear una opinión sobre lo que sucede en el mundo cofrade, porque no existe el periodismo objetivo, y mucho menos el "periodismo cofrade" objetivo porque cada uno somos de una hermandad.

Manuel Fernández
@LaCeraFundida